
El volcán Canlaón, ubicado en la isla de Negros, en Filipinas, entró en erupción este lunes por la noche, provocando una columna de cenizas que alcanzó los 3.000 metros de altura. El fenómeno se registró a las 6:51 PM, hora local, y fue confirmado por el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs).
La columna de ceniza fue visible desde varios kilómetros a la redonda y cubrió de polvo volcánico localidades cercanas. Las autoridades emitieron de inmediato una alerta volcánica de nivel 2, lo que indica un aumento de actividad y la posibilidad de nuevas erupciones.
Según Phivolcs, la erupción fue freática, es decir, provocada por el contacto del agua subterránea con el magma caliente, lo que genera explosiones de vapor y ceniza sin expulsión directa de lava. A pesar de no haber registro de flujos piroclásticos, se recomendó a la población no acercarse a un radio de 4 kilómetros alrededor del cráter.
El Canlaón, de más de 2.400 metros de altitud, es uno de los volcanes más activos del archipiélago filipino. Su última gran erupción ocurrió en 2017. El evento de este lunes reavivó la preocupación entre residentes de zonas rurales cercanas, quienes recordaron que muchos cultivos y fuentes de agua pueden verse afectados por la ceniza.
Por otro lado, se suspendieron actividades turísticas y algunos vuelos regionales fueron demorados como medida preventiva. Defensa Civil y equipos locales ya trabajan en la evaluación de posibles daños, aunque no se han reportado víctimas ni evacuaciones masivas hasta el momento.
Las autoridades recomiendan mantenerse informados por canales oficiales y evitar la propagación de rumores, mientras se monitorea la evolución del volcán en tiempo real.
Fuente: Europa Press