Perros sueltos matan a otro en Salto: vecinos hartos del abandono

En Villa Maguey, zona de Arenitas Blancas, Salto, perros sueltos mataron y se comieron a otro. Los vecinos denuncian que no es la primera vez y apuntan al abandono de las autoridades. Hay temor por la seguridad de niños y adultos mayores.

Vecinos de Villa Maguey denuncian ataques reiterados de perros sueltos y exigen respuestas antes de que ocurra una tragedia mayor.

Lo que pasó en Villa Maguey, en la zona de Arenitas Blancas, no es una anécdota. Es el reflejo de una realidad que viene de larga data y que sigue sin respuesta. El video que se viralizó muestra algo impactante: perros sueltos que mataron a otro y comenzaron a comérselo en plena vía pública. Pero lo más preocupante es que no es la primera vez.

Un vecino contó que hace un par de años le mataron un barbilla. Otro recuerda cómo, hace pocos meses, dos perros suyos terminaron igual. Las denuncias están hechas. El INBA (Instituto Nacional de Bienestar Animal) ya recibió varios reclamos, pero hasta ahora, nunca pasó nada. Y la bronca crece.

"¿Qué están esperando? ¿Que maten a un niño?", se pregunta una vecina, que camina todos los días por la zona con sus nietos. Y no es exagerado. Porque estos perros no son solo agresivos con otros animales. También pueden atacar personas. Los más chicos, los adultos mayores, cualquiera que pase cerca puede ser la próxima víctima.

Villa Maguey no es el centro. Arenitas Blancas no aparece en los titulares nacionales. Pero la gente vive, trabaja y cría a sus hijos ahí. Merecen caminar tranquilos por la calle sin miedo a ser atacados por una jauría. Sin embargo, la ausencia del Estado es total.

Los vecinos ya están cansados de denunciar, de mandar fotos, videos, de avisar a las autoridades. “Siempre es lo mismo: te toman el reclamo y después desaparecen”, dice otro vecino. Nadie controla, nadie recoge, nadie hace nada. Y mientras tanto, los perros siguen sueltos.

Acá no se trata de criminalizar a los animales. Los perros no tienen la culpa de estar sueltos. El problema es que nadie se hace cargo. Y cuando la falta de control termina con animales muertos, vecinos angustiados y riesgo real para la seguridad, es momento de actuar.

Los vecinos de Villa Maguey no quieren esperar a que pase una tragedia. Exige presencia, control, respuestas. Ya no alcanza con promesas vacías o con que “estamos trabajando en eso”. La situación está desbordada, y el barrio necesita que alguien ponga orden, antes de que sea demasiado tarde.