“Era una joda”, gritó el hermano después de matarlo sin querer | Noticias Uruguay y Actualidad Nacional - Uruguay Al Día

“Era una joda”, gritó el hermano después de matarlo sin querer

Adolescente de 14 años mató a su hermano en Santa Rosa y fue imputado por homicidio.

La plaza donde ocurrió el hecho suele ser punto de encuentro de jóvenes del barrio.


Un adolescente de 14 años fue imputado por el delito de homicidio tras la muerte de su hermano mayor, de 20 años, en la localidad de Santa Rosa, Canelones. El hecho ocurrió el sábado por la noche, cerca de las 23 horas, durante una juntada entre amigos en una plaza del barrio.

Según detalló la fiscal del caso, Luján Gómez, se trató de un “homicidio ultraintencional”. Esto quiere decir que no hubo una intención directa de matar, sino que el desenlace fue más grave de lo esperado por el agresor. El menor involucrado, que ya fue internado en el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa), permanecerá allí por lo menos 60 días mientras se espera la realización del juicio oral.

De acuerdo al relato fiscal, los dos hermanos solían tener cierta dinámica de juego físico, tipo “juego de manos”. Esa noche, formaban parte de un grupo de jóvenes que había compartido refrescos con alcohol. En ese contexto, el más chico comenzó a provocar al mayor, supuestamente para invitarlo a pelear.

La situación escaló rápidamente. Tras un intercambio de golpes, el adolescente extrajo un cuchillo que llevaba consigo y lanzó varios puntazos. Uno de ellos impactó en la pierna derecha de su hermano, alcanzando una zona que provocó una fuerte hemorragia. En pocos minutos, el joven de 20 años se desangró en el lugar.

El adolescente declaró que portaba el arma blanca porque había tenido problemas previos con otro grupo de jóvenes del barrio, aunque ninguno de ellos estaba presente esa noche. La intención, según sus dichos, era usarla “por si pasaba algo”.

La tragedia sorprendió a los vecinos del lugar, donde tanto la plaza como el grupo de jóvenes eran conocidos por reunirse con frecuencia. El caso quedó en manos de la fiscalía, que continuará la investigación con testigos presenciales y peritajes.

Por ahora, el joven imputado permanecerá bajo custodia del Inisa, en un entorno especializado para adolescentes en conflicto con la ley penal, mientras se define su situación judicial.

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