Una red de corrupción que golpea la confianza en los fondos sociales

Andrade negó vínculos del PCU y el Sunca con el desvío de fondos del Fosvoc.

El senador Óscar Andrade durante una entrevista donde negó vínculos con el fraude del Fosvoc


Andrade negó vínculos del PCU y del Sunca con el fraude en el Fosvoc

El senador del Frente Amplio, Óscar Andrade, negó enfáticamente que el Partido Comunista del Uruguay (PCU) o el Sindicato Único de la Construcción y Anexos (Sunca) hayan recibido dinero proveniente del desvío de fondos del Fondo Social de Vivienda de la Construcción (Fosvoc).

Durante una entrevista, Andrade afirmó que los tres exsindicalistas condenados por el caso —Santiago Bernaola, Bruno Bertolio y Víctor Rivero— declararon que derivaron el dinero al PCU y al Sunca como una "estrategia" para justificar el destino de los fondos y así evitar tener que devolverlos.

“Dijeron que esa plata iba al sindicato y al Partido, pero fue para no devolver un mango”, expresó Andrade.

El senador sostuvo que esa modalidad de financiamiento “no era parte de ninguna estructura partidaria ni sindical” y aseguró que el PCU ni el Sunca recibieron “ni un peso partido por la mitad”. En esa línea, calificó como "inverosímil" la supuesta participación de las cámaras empresariales en un esquema de fraude con fines políticos.

¿Una estrategia para obtener condenas menores?

Según Andrade, los condenados intentaron desviar el foco de la investigación involucrando a instituciones y dirigentes conocidos. A su entender, fue una forma de facilitar un proceso penal abreviado con penas más leves. También sugirió que esa estrategia buscaba frenar el avance de nuevas investigaciones.

Andrade también fue mencionado en las declaraciones judiciales, aunque aclaró que su nombre solo apareció como referencia temporal, dado que los hechos se remontaban a "la época de Andrade" al frente del Sunca. Negó rotundamente haber recibido fondos para su candidatura o la de otros dirigentes del Frente Amplio.

Cómo se orquestó el fraude, según Andrade

El legislador explicó que el desvío de dinero comenzó en 2023, cuando se modificaron las órdenes no reintegrables del Fosvoc, que originalmente se entregaban en materiales y a nombre del trabajador. A partir de ese año, las órdenes empezaron a emitirse en efectivo y a nombre de Bruno Bertolio, sin documentación respaldatoria.

Durante 2023, Bertolio firmó 42 órdenes en esas condiciones. Posteriormente, una funcionaria administrativa, Stella Rey, habilitada a acceder a las cuentas del Fosvoc para el pago de sueldos, participó en el esquema: realizó 192 transferencias irregulares a personas cercanas a Bertolio. Estas personas retiraban el dinero y lo devolvían a los implicados.

Una auditoría interna permitió detectar la maniobra, y como resultado, Bertolio fue expulsado del Sunca. Andrade sostuvo que la demora en descubrir el esquema se debió a que la persona encargada de preparar la auditoría también estaba implicada.

Consecuencias y controles debilitados

El senador señaló que la confianza institucional, sumada a los efectos de la pandemia, contribuyó al debilitamiento de los controles en el Fosvoc. “El error fue permitir el acceso a cuentas con un criterio de urgencia, pero sin mecanismos de verificación posteriores”, dijo.

A raíz del hallazgo, el fondo activó mecanismos de auditoría y presentó la denuncia penal que derivó en las condenas actuales.

Finalmente, Andrade remarcó: “No se puede probar lo que no pasó. No hubo un peso que haya ido al PCU ni al sindicato. Lo que hubo fue una organización que robó con total descaro”.

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