El ministro Carlos Negro presentó ocho medidas de urgencia para reformar el sistema carcelario. Foto: Gastón Britos / FocoUy
El ministro Carlos Negro presentó un plan urgente para transformar el sistema penitenciario
Tras la muerte de cuatro personas privadas de libertad en el ex Comcar, el ministro del Interior, Carlos Negro, compareció ante la Comisión de Seguimiento de la Situación Carcelaria del Parlamento. Allí explicó lo ocurrido y propuso una serie de medidas urgentes para enfrentar la crisis carcelaria.
Negro apuntó contra el actual diseño institucional y reiteró su postura: “el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) no debería depender del Ministerio del Interior, sino funcionar como un organismo descentralizado dentro de un eventual Ministerio de Justicia”.
Según explicó, el sistema penitenciario impacta directamente en la seguridad pública y necesita cambios estructurales para frenar el ciclo de hacinamiento, reincidencia y fortalecimiento del crimen organizado.
¿Cuál es el problema estructural en las cárceles según el ministro?
Negro identificó tres factores clave:
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La situación de calle de quienes egresan sin apoyo del sistema.
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La criminalidad dentro de las cárceles, donde el hacinamiento favorece la conexión entre líderes criminales.
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La reincidencia, ya que muchos presos salen sin herramientas reales de reinserción.
“Las cárceles hoy no deshabilitan la capacidad delictiva; el crimen se fortalece tanto dentro como fuera”, dijo el ministro.
¿Qué medidas urgentes propuso el gobierno?
Negro detalló ocho acciones inmediatas que el Ministerio del Interior planea ejecutar con recursos propios, mano de obra de personas privadas de libertad y apoyo presupuestal extraordinario:
1. Descompresión de módulos críticos
Se realizará un relevamiento y traslado de internos en los módulos 3, 4, 10 y 11, los más hacinados del ex Comcar.
2. Incremento del personal del INR
Se acelerará el ingreso de nuevos funcionarios, el llenado de vacantes y una reorganización del personal actual.
3. Nuevos centros para gestión alimentaria
Construcción de espacios descentralizados de elaboración y logística de alimentos, para evitar dependencias de grandes cocinas centrales.
4. Reconstrucción de salones de visita
Mejoras de infraestructura para facilitar el vínculo familiar, considerado clave en los procesos de rehabilitación.
5. Espacios para programas de reinserción
Se construirán salas específicas para actividades socioeducativas y laborales, hoy casi inexistentes o limitadas por falta de espacio.
6. Fortalecimiento de programas de trabajo y estudio
Aumento de la oferta educativa, formación técnica y actividades laborales con perspectiva de inserción en el mundo del laburo.
7. Inversión tecnológica
Colocación de nuevas cámaras de videovigilancia, kits de monitoreo y renovación del cableado en módulos críticos.
8. Mejora en la comunicación con las familias
Se crearán canales rápidos y eficaces para garantizar contacto fluido entre los presos y sus familias.
¿Qué se espera con este plan?
El objetivo es disminuir la violencia interna, evitar el crecimiento del crimen organizado tras las rejas y mejorar las posibilidades de reinserción. Las medidas también buscan dar señales políticas claras sobre la urgencia de una reforma carcelaria.
El comisionado parlamentario Juan Miguel Petit respaldó la necesidad de un acuerdo social y político amplio para repensar el sistema penitenciario en su conjunto.
¿Cuál es la situación actual del sistema penitenciario uruguayo?
Según el último informe de la Institución Nacional de Derechos Humanos, Uruguay tiene una de las tasas más altas de personas privadas de libertad en América Latina: más de 13.000 personas, en cárceles diseñadas para menos.
Además, el 70% de los internos tiene antecedentes de consumo problemático de sustancias, y más del 60% no terminó la educación secundaria. Solo el 20% accede a programas de trabajo o estudio dentro del sistema.