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Fernando Muslera durante un entrenamiento en Turquía, en sus últimos días en Galatasaray. Foto de Rene Nijhuis/MB Media/Getty Images
El arquero uruguayo dejó Galatasaray tras 14 años y estudia propuestas de Peñarol, Estudiantes y Vélez para continuar cerca de su gente.
Fernando Muslera, uno de los referentes más destacados del arco uruguayo, atraviesa una etapa de definiciones en su carrera. A los 38 años, y tras más de una década defendiendo los colores del Galatasaray, el arquero decidió cerrar su ciclo en Turquía para buscar un nuevo destino profesional más cerca de su entorno familiar.
Con propuestas sobre la mesa de Peñarol, Estudiantes de La Plata y Vélez Sarsfield, Muslera analiza cuidadosamente los próximos pasos. Según fuentes cercanas, la oferta más concreta hasta el momento proviene del club platense, que le habría presentado un contrato hasta diciembre de 2026, con condiciones económicas competitivas y participación garantizada en la Copa Libertadores.
Desde Montevideo, Peñarol también sigue de cerca la situación. El presidente Ignacio Ruglio confirmó que han mantenido contacto con el entorno del jugador y que las conversaciones siguen abiertas. Para el club carbonero, sumar a un arquero de esa experiencia sería un gran refuerzo para el tramo decisivo de la temporada.
Vélez, por su parte, busca renovar su plantel y también se sumó a la disputa. Como Muslera nació en Buenos Aires, no ocuparía plaza de extranjero, lo que facilita su incorporación al fútbol argentino.
Más allá de lo deportivo, el factor determinante en esta etapa parece ser la familia. Muslera quiere estar cerca de Punta del Este, donde planea establecerse con los suyos y acompañar especialmente a su hermana, que se encuentra en plena etapa de embarazo. En varias entrevistas recientes, el arquero dejó en claro que su decisión no estará motivada por lo económico, sino por la posibilidad de estar junto a sus afectos.
En lo futbolístico, los tres equipos ofrecen un proyecto competitivo y la chance de jugar la Copa Libertadores. Para Muslera, que fue figura en cuatro mundiales con Uruguay y levantó la Copa América 2011, la oportunidad de cerrar su carrera jugando en la región que lo vio crecer es un incentivo fuerte.
Desde sus primeros pasos en Montevideo Wanderers y su pasaje por Nacional, Muslera mostró siempre compromiso y regularidad. Su experiencia en Europa, primero en la Lazio y luego en el Galatasaray, le permitió sumar 21 títulos y más de 550 partidos internacionales. Hoy, con la vista puesta en su gente y su país, se prepara para escribir el último capítulo de una carrera marcada por la constancia y la cercanía con su tierra.
El desenlace parece inminente. Mientras tanto, en Montevideo, La Plata y Buenos Aires, los hinchas esperan la noticia que definirá el próximo destino de uno de los arqueros más importantes del fútbol uruguayo contemporáneo.
