El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Gideon Saar (REUTERS)
Israel afirmó haber retrasado el desarrollo nuclear iraní con bombardeos estratégicos. Mientras tanto, Europa pide retomar las negociaciones pese al fuego cruzado.
El ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar, aseguró que los recientes bombardeos realizados por su país sobre objetivos en Irán lograron frenar el avance del programa nuclear iraní. Según indicó al diario alemán Bild, los ataques habrían retrasado la posibilidad de que Teherán desarrolle un arma nuclear "al menos dos o tres años".
Saar afirmó que la ofensiva iniciada el 13 de junio obtuvo "resultados muy significativos", con énfasis en la eliminación de figuras clave que promovían la militarización del programa atómico. "Haremos todo lo que podamos. No nos detendremos hasta hacer todo lo posible para eliminar esta amenaza", expresó.
También aclaró que el objetivo del gobierno israelí no es un cambio de régimen en Irán. "Al menos hasta ahora, no lo hemos definido así", comentó.
Como respuesta, Irán lanzó drones y misiles hacia territorio israelí. El régimen de Teherán insiste en que su programa nuclear tiene fines civiles, y niega cualquier intención armamentista. En paralelo, el canciller iraní Abbas Araqchi declaró desde Ginebra que no retomarán las conversaciones nucleares con Estados Unidos mientras sigan los ataques, aunque sí se mostraron dispuestos a seguir dialogando con Alemania, Francia, el Reino Unido y la Unión Europea.
En el plano militar, el jefe del Estado Mayor israelí, Eyal Zamir, habló de “una campaña prolongada” y calificó la operación como “la más compleja de nuestra historia”. Según Zamir, ya se lograron avances importantes, aunque advirtió que aún podrían venir días complicados.
Durante el octavo día de enfrentamientos, las alarmas volvieron a sonar en el sur de Israel. En Haifa, el hospital Rambam atendió a 19 personas heridas, una de ellas en estado grave. Mientras tanto, las fuerzas israelíes intensificaron sus ataques contra lanzadores de misiles en el suroeste iraní, y se reportaron nuevas explosiones en zonas sensibles de Teherán.
Desde Europa, los ministros de Exteriores de Alemania, Francia y el Reino Unido pidieron a Irán volver al camino diplomático, sin esperar a que termine la escalada militar. Fuentes diplomáticas señalaron que David Lammy, ministro británico, trasladó un mensaje del gobierno de Estados Unidos, que propone a Irán abandonar por completo su programa de enriquecimiento de uranio a cambio de retomar las negociaciones.
Ante la creciente tensión, varios países —entre ellos el Reino Unido y Suiza— decidieron evacuar a sus diplomáticos de Teherán por razones de seguridad.