¿Para qué patrullar si los sueltan igual? Indignación en la Republicana

Un motociclista con antecedentes judiciales fue detenido tras huir de la Guardia Republicana en una moto robada. El fiscal Valerio dispuso su liberación pese a la evidencia, generando sorpresa y preocupación entre los involucrados.

La moto robada fue recuperada tras una persecución, pero terminó con múltiples daños. Foto: Gastón Britos / FocoUy

Un hombre de 32 años fue detenido por la Guardia Republicana tras protagonizar una persecución a alta velocidad en Ciudad de la Costa. La moto que conducía había sido robada horas antes en Montevideo. Sin embargo, pese a los antecedentes del conductor y a la evidencia delictiva, el fiscal Fernando Valerio dispuso dejarlo en libertad.

Todo comenzó el sábado por la tarde, cuando un patrullero de la Republicana detectó una moto circulando con maniobras imprudentes por Avenida de las Américas y Melchora Cuenca. El conductor no acató la orden de detención, y se inició una persecución que culminó en ruta 101, metros antes de la rotonda del aeropuerto viejo. Allí, el hombre perdió el control y chocó contra una barrera de contención.

Los efectivos constataron que la moto tenía la matrícula cortada y había sido denunciada como robada apenas dos horas antes, en el barrio Aguada. La víctima, un estilista que estaba trabajando al momento del hurto, reconoció el vehículo al ver imágenes que circularon en redes sociales. A pesar de haberla dejado trancada en avenida General San Martín y Yatay, la moto desapareció y quedó captada en cámaras de seguridad.

Según contó el damnificado, la moto –una Vital Advance– fue recuperada en mal estado, con múltiples daños. Estimó que deberá reemplazar o reparar al menos once componentes para volver a usarla. “Me la destrozaron, pero al menos apareció”, dijo el dueño, quien fue contactado por la Policía para informarle sobre la recuperación del rodado.

En paralelo, el fiscal Valerio ordenó relevar cámaras de la zona, tomar actas a los policías actuantes y realizar pericias mecánicas a la moto. También reconoció que el detenido incurrió en el delito de receptación, aunque afirmó no recordar todos los detalles del caso. No obstante, pidió el cese de detención, lo que generó desconcierto entre los efectivos que participaron en la captura.

La decisión reabrió el debate sobre la reincidencia y la respuesta del sistema judicial ante hechos de inseguridad. El detenido, según fuentes policiales, había salido de prisión hacía apenas un mes y tenía medidas judiciales vigentes.

Por ahora, la investigación sigue abierta. La víctima aguarda el resultado de las pericias y la reparación de su moto. Mientras tanto, el caso suma un nuevo capítulo a las discusiones sobre justicia, reincidencia y garantías en el sistema penal uruguayo.