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La tensión en el Congo sigue latente, con enfrentamientos que involucran a militares en misiones de paz.
En medio de una tregua rota por el M23, dos militares uruguayos resultaron heridos en el Congo. La situación vuelve a ser crítica.
El Congo, un lugar donde la calma nunca es completa, volvió a ser escenario de violencia. En medio de un alto al fuego que se suponía estable, el grupo armado M23 retomó los ataques en las cercanías del aeropuerto de Goma, arrastrando al fuego cruzado a quienes, desde hace meses, cumplen misiones de paz en territorio africano.
El Ejército Nacional de Uruguay confirmó que dos de sus efectivos resultaron heridos en este nuevo episodio de violencia. Diego Ferreira, sargento del Servicio de Veterinaria y Remonta, recibió un disparo en el tobillo izquierdo. Jhon Patrón, cabo de segunda del Regimiento de Caballería Nº3, fue alcanzado por balas en ambas manos. A pesar de lo preocupante de la situación, ambos están fuera de peligro, según el informe oficial.
La tensión en el Congo no es nueva. Las promesas de tregua suelen ser tan frágiles como el terreno que pisan las fuerzas de paz. Este lunes no fue la excepción. La base del Batallón "Uruguay IV" estuvo a metros del peligro cuando los enfrentamientos alcanzaron su punto más crítico. El Ejército, sin embargo, aseguró que el resto del contingente uruguayo está en perfecto estado de salud, aunque el recuerdo del sábado pasado aún pesa, cuando otro militar perdió la vida y cuatro resultaron heridos, uno de ellos gravemente.
La misión de paz parece todo menos pacífica. El fuego cruzado entre las fuerzas del Congo y los insurgentes del M23 no distingue nacionalidades ni banderas, y el riesgo para quienes están ahí es constante. Sin embargo, los reportes del Ejército destacan que, por el momento, la situación vuelve a estar bajo control, al menos en apariencia.
Mientras tanto, a miles de kilómetros de distancia, las familias de estos soldados miran con preocupación cada noticia que llega. En un territorio tan volátil como este, la calma siempre parece ser solo un respiro entre tormentas.
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