Eduardo Viera abandonó Colonización tras quedar expuesto por incompatibilidades legales y presiones políticas. Foto: Dante Fernandez / FocoUy
Presionado por la ilegalidad de su cargo, Eduardo Viera dejó el Instituto de Colonización.
El presidente del Instituto Nacional de Colonización, Eduardo Viera, finalmente presentó su renuncia este jueves, cercado por el escándalo que lo señalaba por ocupar el sillón principal del organismo mientras seguía siendo colono, algo expresamente prohibido por la Constitución.
"Lamentablemente se ha hablado mucho y mal de Colonización. Se manoseó la herramienta, se buscó desprestigiarla, y eso me dolió como productor", dijo Viera al anunciar su salida. Pero más allá de la emoción, el dato es claro: la renuncia llegó cuando la ilegalidad ya era inocultable.
La caída de Viera suma otro nombre a la lista de bajas que acumula el nuevo gobierno en tiempo récord. Tres meses de gestión y ya van tres jerarcas que se ven obligados a abandonar el cargo.
Desde el Partido Colorado, el diputado Felipe Schipani lo resumió sin filtros: "Tres meses de gobierno, y tres renuncias. No se recuerda un gobierno con tantas renuncias en tan poco tiempo". A su vez, le reconoció al senador Robert Silva haber advertido de entrada que Viera violaba el artículo 200 de la Constitución.
El senador nacionalista Sebastián Da Silva, intentando poner paños fríos, desvió el foco: "Nosotros impulsamos créditos del BROU para el agua de los tambos, ahí tiene mucho para hacer", deslizando que Viera podría ser reubicado en el INALE.
Robert Silva, el primero en denunciar la irregularidad, insistió en que el gobierno recién ahora hizo lo que debía: "Desde el primer momento pusimos en evidencia este tema. Ahora falta resolver el caso de la directora colona que sigue en el directorio".
El exministro Pablo Mieres, fiel a su estilo directo, fue al hueso: "Están dispuestos a batir todos los récords de renuncias por violaciones de normas. Hace una semana trataba de burros a los que decían que debía renunciar. Otro papelón para estos primeros tres meses. Increíble".
Gabriel Gurméndez, diputado colorado, apuntó a la caja de Colonización: "Colorín colorado… este cuento se acabó. Ahora toca interpelar la política de gastar más de 175 millones de dólares en comprar estancias, cuando el país tiene prioridades mucho más urgentes. Los 32 millones de la estancia María Dolores son apenas el comienzo de lo que Fratti ya anunció".
Desde su cuenta en redes, Andrés Ojeda lo resumió en pocas palabras: "Va quedando solo Arim pendiente…"
Las redes sociales ardieron. Dirigentes de todos los partidos, militantes y ciudadanos criticaron sin piedad un nuevo capítulo de desprolijidades en la administración pública. La política de tierras, la acumulación de compras millonarias y las incompatibilidades legales siguen siendo el talón de Aquiles de un gobierno que todavía no logra estabilizar su equipo.
Una gestión que, en apenas tres meses, ya acumula más escándalos que logros concretos.