Guillermo Tolosa defendió el nuevo rumbo económico del país con tono cercano. Federico Meirelles/Uruguay Al Día
Tolosa aseguró que Uruguay vive una nueva realidad económica y llamó a empresarios a ajustar sus expectativas a la inflación controlada del país.
El presidente del Banco Central del Uruguay (BCU), Guillermo Tolosa, instó al empresariado local a alinear sus decisiones con la nueva realidad económica del país. Durante su participación en un almuerzo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing (ADM), Tolosa resaltó que Uruguay mantiene una inflación controlada desde hace dos años, aunque persisten expectativas altas que afectan la formación de precios y las negociaciones salariales.
“Es hora de que caiga la ficha”, expresó Tolosa, en relación al objetivo del BCU de mantener la inflación en torno al 4,5% anual. Para él, esta meta ya no es solo un deseo técnico sino una política de Estado.
Con un tono distendido, mezclando humor y referencias culturales locales, Tolosa apuntó que incluso plataformas de inteligencia artificial como ChatGPT proyectan mejor la inflación que muchos empresarios. Lo atribuyó a una “distorsión cognitiva”, una desconexión entre los datos concretos y las creencias que persisten en ciertos sectores.
Esa misma distorsión, dijo, se refleja en la costumbre de ahorrar en dólares, pese al fortalecimiento reciente del peso uruguayo. En ese sentido, anunció que el BCU lanzará en septiembre un programa para fomentar el ahorro en moneda nacional.
Tolosa se refirió también a las “barreras mentales” que impiden aceptar esta nueva etapa económica. Para ilustrar esa resistencia, citó a “tres pensadores con K”: Thomas Kuhn, Daniel Kahneman y, en tono jocoso, al relator Alberto Kesman, recordando su clásica frase “¡hay que avisarle, Yanuzzi!”.
El titular del BCU defendió que Uruguay ya se encuentra en un régimen monetario moderno, con reservas equivalentes al 21,6% del PIB y estabilidad ante shocks externos. Como ejemplo, mencionó que el reciente aumento de aranceles de Estados Unidos tuvo bajo impacto local.
Durante su exposición, dividida en tres bloques —“Nueva realidad”, “El paradigma que quiere emerger” y “Activación del paradigma”— Tolosa explicó que el país ahora opera bajo una meta de inflación de 4,5%, con un margen de tolerancia de 1,5 puntos, lo que representa un giro respecto al enfoque anterior.
Advirtió, sin embargo, que alcanzar plenamente este objetivo depende de mantener ciertas condiciones. Si bien las expectativas de inflación han bajado a un mínimo histórico, todavía hay camino por recorrer para llegar a los niveles de economías más consolidadas.
Tolosa remarcó que el país ha logrado mantener la inflación incluso con un dólar al alza, algo inédito a nivel local. Según sus palabras, este momento representa la mejor oportunidad en ocho décadas para erradicar definitivamente la inflación como un problema estructural.
El presidente del BCU subrayó además la necesidad de mejorar el acceso al crédito, en particular al crédito hipotecario, y señaló que las tasas en moneda local para empresas aún son elevadas en comparación regional. Reconoció que el país paga intereses altos por endeudarse, pero que una corrección en ese punto permitiría liberar recursos para atender sectores más vulnerables.
También afirmó que el BCU trabaja junto al Ministerio de Economía y Finanzas para que las próximas negociaciones salariales se basen en proyecciones claras, informadas y ancladas en la política monetaria.
Para cerrar, dejó un mensaje enfático: “es decisión de todos salir del piloto automático para alcanzar y disfrutar el nuevo paradigma”. Con esto, apeló a la necesidad de cambiar la percepción colectiva para acompañar los datos reales de la economía.